En los
últimos años hemos estado un par de veces en Cantabria y nos ha gustado
bastante, sobre todo sus pueblos. Entre ellos quiero destacar San Vicente de la
Barquera, por su gastronomía, sus calles y sus gentes. Lo primero que te
encuentras cuando llegas es su precioso puerto, allí hay un gran parking donde
puedes dejar el vehículo para recorrer San Vicente a pie. Poco a poco comienzas
a pasear sus calles y puedes ir observando los monumentos que tiene, nosotros
estuvimos por la noche y como estaban iluminados son preciosos. Personalmente
lo que más me gusto fue la muralla, aunque hay varias iglesias e incluso un
castillo en el que tienes que pagar por entrar y como era demasiado tarde
decidimos no hacerlo.
No
obstante, si en algo destaca San Vicente de la Barquera es en la animación que
tienen sus bares. Las dos veces que hemos ido era entre diario y había gente en
los establecimiento hosteleros, algo que en nuestra zona no ocurre mucho. Si os
puedo dejar una sugerencia pedir sardinas asadas, ya que están riquísimas y son
muy baratas. Exactamente no me acuerdo del lugar donde estuvimos cenando, pero
hay numerosos bares al lado del puerto y a precios bastante asequibles, así que
elegir el que más os guste. Además, en algunos de ellos podéis degustar sidra
asturiana, una bebida muy buena para acompañar vuestras raciones.
En San Vicente
de la Barquera nos alojamos en una casa rural que se encuentra a las afueras
del pueblo, la única pega que hay que coger el coche para bajar al pueblo y que
está un poco difícil de encontrar, pero es un alojamiento con buen precio,
incluso en los meses de verano y que cuenta con unas vistas increíbles. La casa
rural se llama Punta Linera. En otra
de nuestras visitas estuvimos alojados en una casa rual en un pequeño pueblo
entre Comillas y San Vicente de la Barquera llamado Alfoz de Lloredo. En él se
pueden encontrar dos preciosos edificios como son la iglesia y el monasterio,
en este último se puede comprar un rico queso realizado por los propios monjes.
Otro de
los municipios que me sorprendieron y que está muy cerca de San Vicente de la
Barquera es Comillas. Es un pueblo muy turístico debido a la gran cantidad de
monumentos que tiene. Algunos son pagando, pero otros se pueden ver de manera
gratuita. Hay dos clases de rutas la monumental y la modernista, nosotros no
vimos todos los monumentos, ya que hay algunos que no destacan nada en
absoluto, así que os indicaré los más importantes.
De la
ruta monumental el edificio que más destaca es el denominado El Duque, cuesta
un poco encontrarlo, pero merece la pena, ya que recuerda mucho a las películas
de Harry Potter, lo malo que no se puede ver por dentro. El edificio data de
finales del siglo XIX y principios del XX y tiene una gran influencia
anglosajona. En esta misma ruta también se pueden visitar la Casa Ocejo, el
Puerto, el Mirador de Santa Lucía, el Corro San Pedro, el Corazón de Jesús, La
Cárcel, el ayuntamiento antiguo, la iglesia de San Cristóbal, el Corro Campios
y el ayuntamiento nuevo.
Bajo mi
punto de vista está mucho mejor la ruta modernista; el monumento que más nos
llamó la atención fue el Palacio de Sobrellano que data 1881. Al margen del
edificio propiamente dicho también destacan los jardines que lo rodean, por
desgracia no lo pudimos ver por dentro, pero todos los días hay visitas a
distintas horas del días. No obstante, se puede recorrer por el exterior y ver
un poco de lo que contiene gracias a sus grandes ventanales.
Bajando
por uno de los laterales del Palacio podemos observar el Capricho de Gaudi, un
edificio del famoso arquitecto catalán que realizó en su primera etapa. Es una
pequeña casa en la que llama la atención su elevada torre y sus preciosos
azulejos en los que destaca la flor de girasol. Para poder disfrutar de este
monumento hay que pagar, sin embargo como ya os he indicado se pueden hacer
fotos desde el Palacio.
Dentro
de la ruta modernista también se encuentra el cementerio que está situado en
una colina frente al mar. Está enclavado dentro de unas ruinas góticas de una
antigua iglesia que aún conserva algunas arcadas ojivales y algún tramo del
muro de sillería. No obstante, lo que más destaca es el ángel que se encuentra
en lo alto del muro de la iglesia.
Otro de
los monumentos que se pueden ver desde
diferentes puntos de la localidad es la Universidad Pontificia y su
espectacular puerta. Asimismo, existen otros puntos de la localidad que se
engloban dentro de la ruta modernista como la Fuente de los Tres Caños, la
portada de la Casa Moro, la Coteruca, el asilo o el monumento al Marques de
Comillas, desde donde hay una vistas a la playa preciosas.
El
último pueblo que visitamos por esta zona es Santilla del Mar, según dicen
algunos críticos está considerado el municipio más bonito de España, pero a mi
me decepcionó bastante. Es verdad que es un pueblo hermoso debido a sus
empedrados y sus diferentes monumentos, así como por la cantidad de
establecimientos hosteleros y tiendas que se pueden encontrar por cada una de sus
calles, pero la realidad es que tiene menos vida que San Vicente de la Barquera.
Además, como nosotros tenemos el placer de recorrer a menudo las calles
empedradas de Sigüenza pues todo aquello no os llamó mucho la atención.
No
podría acabar esta pequeña ruta por Cantabria sin nombra el Parque de Cabárceno. Es una especie
de safari que se encuentra muy cerca de Santander y que merece la pena visitar
debido a la gran cantidad de especies que lo integran. Cuesta poco más de
veinte euros por persona, pero puedes pasar todo el día, incluso comer allí.
Vas recorriendo el parque con el coche y vas parando en los aparcamientos
habilitados para observar los diferentes tipos de animales desde elefantes
hasta hipopótamos pasando por los osos. Además, realizan dos espectáculos, uno
de agua con focas y leones marinos y otro de cetrería con diferentes tipos de
aves. Asimismo, cuenta con un fabuloso reptilario en el que podréis observar
muchísimas especies diferentes. Seguro que si vais con niños les encantará,
aunque si sólo vais adultos, pero sois amantes de los animales también estoy
segura de que pasaréis un buen día. Y aquí termina mi relato sobre Cantabria,
espero volver y explorar más pueblos para poder contároslo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario