La magia del agua en los alrededores de Oña

Gracias a las lluvias del mes de marzo, numerosos pueblos de España estaban más bonitos que de costumbre. Una escapada interesante es la del pueblo de Oña, que se encuentra ubicado en la provincia de Burgos y tiene varios municipios alrededor con diferentes cascadas en las que puedes ver impactantes saltos de agua.

El pueblo de Oña tiene varias cosas que ver como el Monasterio de San Salvador o su paseo peatonal al lado del río. Además, hay varios bares y dos pub para aquellos que quieran salir por la noche a tomarse el algo. El alojamiento elegido fue la casas rural Camino Condal. El alojamiento es muy confortable, pero sí hay que destacar algo sería la amabilidad de su propietaria, Inma y los impresionantes desayunos que ofrece a base de frutas peladas y en almíbar, embutidos, bollería salada y dulce y zumo de naranja.

A sólo cinco kilómetros de Oña se debe visitar Pedrosa de Tobalina, en la cual se puede admirar una cascada que recuerda un poco a la del Niágara, debido a la gran cantidad de saltos que tiene distribuidos de manera horizontal. Además, para aquellas personas que no les guste mucho andar, que no se preocupen, ya que se puede aparcar muy cerca. 

Para continuar vuestro viaje podéis hacerlo a través del Puerto de Ángulo, en la provincia de Álava, que tiene un paisaje espectacular que podéis admirar desde el coche. A continuación tomáis la carretera dirección Cozuela y visitáis la cascada de Peñalados. Volviendo a Oña os podéis desviar a comer a 17 kilómetros y visitar el pueblo de Verberana, donde se encuentra el restaurante Amparo. Es una antigua casa arreglada y en ella puedes encontrar menús a 18 euros en los que puedes elegir entre varios platos de gran calidad.

Continuando el regreso hacía Oña se puede visitar el municipio de Frías, donde os podéis acercar a ver su castillo. Además, las diferentes calles de la localidad están empedradas, lo que ofrece un aspecto totalmente medieval a todo el municipio. Si os da tiempo también podéis acercaros hasta Tobera, donde hay una ermita y unas cascadas, así como un paseo de piedra con barandilla de madera que baja hasta el municipio.

Si estáis más de un día en Oña os dará tiempo a disfrutar de otros saltos de agua. La segunda jornada os podéis acercar a Soncillo, un pueblo que se encuentra pegado a Cantabria para ver el Salto de las Pisas, lo malo es que debido a la nieve que había en marzo no se pudo visitar, ya que el río estaba desbordado. No obstante, os  podéis acercar a Urbaneja del Castillo a admirar su hermosa cascada que está justo a la entrada del pueblo. Podéis dejar allí los coches, aceros las respectivas fotografías en el salto de agua y subir al pueblo por una escaleras. Es un municipio pequeño, pero seguro que os encantará recorrer sus calles. Además, tiene varios establecimientos hosteleros para comer, así que escoger el que más os guste, nosotros nos decantamos por un menú en el que servían un rico chuletón, Antes de volver a Oña os podéis acercar a Pesquera del Ebro para disfrutar de sus fabulosos miradores, que dan unas preciosas vistas de este caudaloso río.

Bajando para Madrid podéis visitar otros municipios que también tienen bastantes monumentos que ver como Covarrubias, Santo Domingo de Silos o el desfiladero de Yecla. Además, si no tenéis prisa, en vez de bajar por la A-1 podéis atravesar la Sierra de la Demanda, donde veréis un fabuloso paisaje, así como subir por el puerto El Manquillo.