Tenía ganas de hacer esta receta, ya que me recuerda a una
película que me encantó cuando la vi en mi adolescencia y que lleva este mismo
nombre. La verdad es que me sorprendió mucho el resultado y es plato exquisito
que se puede tomar como entrante. En la versión original de la receta hay que
utilizar otro tipo de tomates típicos de Estados Unidos, pero como no los
encontré cogí unos ricos tomates del huerto y el resultado fue fantástico. También
probé a hacerlo con tomates maduros y están también muy ricos así que si os
apetece podéis hacer un variado y ya me contaréis cuales son los que más os
gustan.
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2 tomates
grandes.
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Harina de
trigo para rebozar.
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2 huevos.
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Un chorro
de leche.
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Pan rallado
para rebozar.
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2
cucharadas soperas de maicena.
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1
cucharadita de pimentón dulce.
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Sal.
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Pimienta.
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1
cucharada de mantequilla.
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Aceite de
girasol.
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Salsas
para acompañar (opcional).
Elaboración:
Lavamos los tomates y cortamos en rodajas anchas desechando
la parte superior e inferior ya que eso nos afearía el plato. Los dejemos en
una rejilla con sal durante 20 minutos para quitarles un poco el agua.
Mientras tanto vamos preparando nuestros platos para rebozar
los tomates. En el primer plato colocamos la harina, en el segundo los huevo
batidos con un poco de leche y en el tercero el pan rallado con la maicena, el
pimentón y la pimienta.
Ponemos al fuego una sartén con un poco de mantequilla y
cuando se haya desecho echamos el aceite sólo para que nos cubra hasta la mitad
los tomates, ya que luego habrá que darles la vuelta.
Ahora llega la hora del rebozado, pasamos por harina, huevo
y la mezcla del pan rallado y lo ponemos a freír en la sartén a fuego
medio-alto hasta que estén bien fritos por los dos lados. Sacamos a escurrir a
un papel y vamos haciendo todas las rodajas por tandas sin superponer unas
otras para que se frían bien por ambos lados.
Una vez que han escurrido el exceso de aceite en el papel
absorbente, los colocamos en el plato y los acompañamos con las salsas que más
os gusten en este caso he empleado kétchup y salsa
ranch, una salsa que ya he empleado para otros platos americanos y que ha
quedado genial en este plato.
Gasto: 1 euro.
Raciones: 2 raciones
Dificultad: Fácil.
Hola Laura, creo que pocos son los que hayan visto esta película, y se resista a hacerlos, yo los he hecho en varias ocasiones, con los tomates verdes americanos pues son dulces y están maduros por dentro.
ResponderEliminarMe hubiera gustado hacerlo con ese tipo de tomates, pero por desgracia no encontré, y como tenía del huerto de mi marido no me lo pensé dos veces y lo hice con esos y fueron todo un éxito jeje
EliminarQuién no recuerda la película... a veces pasa eso, que uno no encuentra los ingredientes originales de la receta, pero con los tomates de tu huerto imagino que estarán de miedo
EliminarAbrazos y buena semana!!!
¡Me encantó la película, me la recomendó mi hermano en su día!
ResponderEliminarSiempre me quedé con las ganas de hacer esta receta y un día por otro ya se sabe.
Así que aprovechando que sí estoy en USA y que gambas no encuentro pero tomatillos sí, voy a tratar de hacerlos.
¡Gracias por la receta, Laura!
¡Besotes y feliz día!
un plato de película sin duda!!!!! tienen una pinta estupenda!
ResponderEliminarBesitos
Anny
https://localizadordelocuras.wordpress.com/