PASTA CON QUESO GRATINADO

La pasta me encanta, aunque la verdad es que no la suelo cocinar mucho por las calorías que tiene. No obstante, ahora en verano se pueden realizar deliciosas ensaladas de pasta que disminuyen el número de calorías y además son muy refrescantes para estos días de verano. Sin embargo, hoy no os traigo una receta de estas, si no todo lo contrario una comida que es una bomba calórica, pero bueno un día es un día.

Ingredientes:

-          300 gramos de macarrones.

-          80 gramos de bacon.

-          Media cebolla.

-          80 gramos de pan rallado.

-          40 gramos de margarina.

-          40 gramos de harina.

-          1 cucharada de mostaza.

-          200 mililitros de leche.

-          200 mililitros de nata.

-          100 gramos de queso chedar.

-          125 gramos de queso rallado.

-          Un poco de perejil.

-          Un poco de orégano.

-          Sal.

     -          Aceite de Oliva Virgen extra. 

Elaboración:

Lo primero que hacemos es cocer la pasta siguiendo las instrucciones del fabricante. Luego la escurrimos y la reservamos. Nuestro siguiente paso es cortar en trozos pequeños la cebolla y la ponemos en una sartén con un poco de aceite, cuando vemos que está casi dorada le añadimos el bacon también cortado en trocitos.

A continuación, colocamos en una fuente apta para horno la pasta y encima el bacon y la cebolla y nos ponemos manos a la obra para realizar nuestra salsa de queso, que será el paso más laborioso de esta receta y que tiene que queda como una especie de bechamel.

Lo primero que hacemos es colocar en un cazo la margarina y cuando está derretida echamos la harina y la doramos para evitar que tenga sabor a harina cruda. A continuación, mezclamos la nata y la leche y la vamos incorporando a la mezcla poco a poco y le vamos dando con unas varillas o con una cuchara de madera intentando que no se formen grumos. El siguiente paso es añadirle la mostaza y la sal y seguir removiendo. Luego le echamos el queso chedar cortado en taquitos y la mitad del queso rallado y esperamos hasta que se funda con la salsa.

Ahora precalentamos el horno a 200º y por encima de la pasta, el bacon y la cebolla, echamos esta salsa, ponemos el queso rallado restante y espolvoreamos el pan rallado. Le ponéis la opción de gratinar y en cinco minutos está listo vuestro plato de pasta. Es un plato muy contundente, así que luego no os echéis la siesta, haced algo de ejercicio para evitar esas calorías de más.

Tiempo de preparación: 35 minutos

Gasto: 4 euros.

Raciones: 4 raciones.

Dificultad: Fácil.