Aunque
es verano y no apetece mucho encender el horno, seguro que para probar algún
dulce importa poco pasar un poco de calor. Esta receta se parece mucho a la de
las napolitanas
de chocolate que expliqué hace unos días, lo único es que los croissant los he hecho más grandes y en
vez de utilizar onzas de chocolate he usado nocilla, aunque se puede cocinar
con cualquiera de los productos.
Ingredientes:
-
1 lámina de hojaldre.
-
¼ de un tarro de nocilla.
-
1 huevo.
-
Fideos de chocolate (opcional).
-
Chocolate fondant (opcional).
Elaboración:
Lo
primero que hacemos es extender la lámina de hojaldre, en función de la forma
que sea se corta de una manera o de otra y los croissant saldrán más grandes o
pequeños. Si es rectangular como en mi caso coges un cuchillo y vas haciendo
triángulos cogiendo las esquinas de la masa como referencia, si por el
contrario es redonda tu punto de referencia tiene que ser el centro y tienes
que ir haciendo los cortes hacía afuera, por lo que normalmente te saldrán más
croissant.
Una vez
que tienes dibujados los triángulos les pegas un corte en la base, les pones un
poco de nocilla y los comienzan a enrollar. Una vez que tienes una especie de
rollo sacas las puntas hacia fuera para darles formas de croissant. A continuación los colocas en una bandeja apta para
horno (poner papel para horno para que no se peguen) y los pintas con el huevo
batido. Si quieres les puedes añadir fideos de chocolate por encima.
Precalienta el horno a 200º y mantienes los croissants durante 20 o 25 minutos.
Mientras tanto vas fundiendo el chocolate fondant en el microondas. Una vez que
sacas los croissants del horno,
dejas que se enfríen y bañas los lados en el chocolate fondant. Los metes al
frigorífico y ya están listos para comer, también puedes comerlos templados y
así el chocolate está medio derretido y están riquísimos.
Tiempo de preparación: 40 minutos
Gasto: 2 euros.
Raciones: De 5 a 8.
Dificultad: Fácil.
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