DOS ENTRANTES CON QUESO

Como parece que os gustaron los entrantes que hice de queso hace unas semanas, he decidido ponerme manos a la obra y colgar otro post de este gran producto, que sin duda es mi favorito. Además, como tanto en este país como en los que tenemos alrededor hay tantas variedades, hay sin fin de recetas que llevan algún tipo de queso.

QUESO CAMEMBERT AL HORNO:

Ingredientes:

-          400 gramos de queso camembert.

-          2 dientes de ajo.

-          Perejil.

-          Aceite de Oliva Virgen Extra.

Elaboración:

Abrimos la caja que contiene el queso y pinchamos la corteza con un tenedor. A continuación, comenzamos a realizar el majado con los dos dientes de ajo picados finamente, el perejil y le añadimos el aceite. Lo machacamos todo y cubrimos la parte de arriba del queso. Lo volvemos a tapar con el papel y lo dejamos así cinco minutos para que todos los sabores vayan penetrando en el queso.

Precalentamos el horno a 200º, sacamos el queso de su caja de madera, le quitamos el  papel y lo ponemos en una fuente apta para horno. Lo introducimos en el horno y lo tenemos 15 minutos hasta que vemos que los ajos están un poco dorados. Lo sacamos y ya está listo para comer. Este aperitivo se puede acompañar con diferentes tipos de pan para que cada uno se lo unte en lo que más le guste. Yo no le quito el ajo de arriba, ya que al tostarse al horno le da un sabor muy rico, pero si no sois muy amantes del ajo o el sabor os parece un poco fuerte se lo podéis retirar antes de llevarlo a la mesa. Incluso lo podéis cambiar por ajo en polvo que os ofrecerá un sabor mucho más delicado.

PROVOLONE CON JAMÓN Y PIMIENTOS:

Ingredientes:

-          300 gramos de queso provolone.

-          1 pimiento verde frito.

-          4 lonchas de jamón serrano.

-          Aceite de Oliva Virgen Extra.

-          Orégano.

Elaboración:

Lo primero que hacemos es coger una fuente redonda apta para horno, hay colocamos una de las mitades del queso, yo compre dos de 150 gramos cada uno. No obstante, si elegís un trozo de queso más grande lo partís por la mitad y listo. Ponéis un poco de aceite, yo utilicé el de los pimientos, en la base de la fuente y colocáis la primera mitad del queso. Encima colocáis el pimiento verde frito, yo utilicé de estos porque los tenía recién hechos y me encantan, pero si no podéis utilizar piquillos, rojos o amarillos. Eso sí secarlos un poco que no tengan mucho aceite, ya que si no os podría quedar demasiado aceitoso.

El siguiente paso es colocar las lonchas de jamón serrano y tapar con el otro trozo de queso. Espolvorear un poco de orégano por encima o la especia que más os guste. Ahora lo metemos al horno, que estará precalentado a 200º, unos 15 minutos o hasta que veáis que la parte de arriba está dorada, y ya está listo para comer.